Dormí durante todo el día, debido a que estaremos realizando nuestras incursiones de noche nuestro horario se ha cambiado, al menos para los “incursores” los otros chicos seguirán haciendo turnos para estar siempre preparados.
Al levantarme recibí buenas noticias de joker, desde las pantallas se pudieron observar múltiples explosiones, estamos seguro que eran nuestras trampas y a juzgar por el tamaño de la explosión Bladimir no escatimo en la potencia de los explosivos. Cayendo nuevamente la noche hicimos cambio de planes. Como Delta ya había logrado su labor este ahora nos apoyaría en la colocación de los explosivos y Vypel haría una última inspección de la zona. Y Alfa tendría una variación, ahora llevaríamos un par de cañones laser. Ya con todos claros sobre qué haría cada uno nos embarcamos en nuestras misiones correspondientes.
Yendo a las mismas zonas donde antes habíamos estado confirmamos lo que joker nos había informado, lo que vimos nos hico estallar de emoción: orkoz despedazados y sus vehículos hechos chatarra humeante. Delta inmediatamente se dispuso a plantar explosivos para hacer intransitable esta vía. Nosotros avanzamos más buscando enemigos rezagados o alguna caravana nocturna. Pasado unas horas nos topamos con lo que buscábamos, un campamento orko con varias cisternas y tanques cerca de estas, mire a Ace y me dio una señal de aprobación así pues buscamos un lugar donde posicionarnos bien y junto con Bladimir soltamos una letal descarga de los cañones láser sobre las cisternas a lo que acto seguido corrimos rápidamente aprovechando la distracción que nos brindaba la enorme destrucción causada por la explosión de las cisternas. Este sería el comienzo de una larga lista de lo que nuestros ataques causarían esta noche.
Todo marcho como viento en popa, acercándose el día nos retiramos a la seguridad del bunker con la satisfacción de saber que vengamos la muerte de muchos de nuestros camaradas.
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